domingo, 4 de marzo de 2007

Pobre del arbol que no tape su tronco.

Mi abuela materna a pesar de no tener más allá de un 6to. grado de la educación general, tenía en sus palabras una sabiduría que resumía en dichos como el que da título a este post.
Lo recordé al leer la noticia de este sábado en la abuelita sobre la inauguración de un centro oftalmológico en Panamá donado por Cuba. Bien para los panameños, quizás el presidente panameño decida ahora en correspondencia hacer algo por los cubanos, caramba, ¿esa no es la tónica de este gobierno?
Me llamó la atención además, como la donación que se hizo hace meses en Haiti o R. Dominicana brilló por su ausencia en los espacios escritos de la abuelita. Parece que en ese momento el horno no estaba para galleticas, como se dice.
Pero sobre todo, este centro cuenta con médicos cubanos, cuando ha sucedido como una especie de abducción con los médicos cubanos y muchos consultorios esperan vacios los pacientes que tienen que llevar sus males a cuestas hacia otros con mejor suerte. Eso aparte de que como me pasó hace poco, fui auscultado por un médico al parecer en práctica de un país africano que de pronto me preguntó: "!¿sus padres padecen de impresión alta?¡", pregunta que entendí a la tercera vez que logro hilvanar con algo de claridad, y que por supuesto como ustedes, entendí que me quería preguntar; eso aparte de no haber placas para Rayos X desde 2 días anteriores, lo cual el desconocía y ordenó, no obstante encontrarse el local 2 puertas más allá de la consulta.
Sobre este mismo asunto medité a raíz de la anécdota anterior, lo desválido que se encuentra el cubano en el sistema de salud ante la mala praxis médica, si sumamos el natural interés de los doctores en ocultar sus faltas a el ya no tan natural interés del gobierno por ocultarlas, nos daría una combinación realmente escalofriante, en la que el paciente objeto de atención esta indefenso por completo e impedido de una posible reclamación o reparación de algun error médico.
Sería por demás interesante si alguien tuviese la estadística de casos reclamados por vía legal, cantidad, gravedad de la reclamación y resolución de esta si la hubiere, estadística comparativa con otros países, etc. Aunque no me parece haber escuchado de juicios por mala praxis médica, quien sabe, quizás sea ventilado en las reuniones del sindicato. Si recuerdo un caso sonado, me refiero a sonado en el medio, no en los medios; sobre un médico que llevaba 20 años practicando la medicina, la cirugía en específico, sin poseer el documento (título) o con uno falso.
En fin, si alguien tiene el dato, pues me lo hace llegar o lo comenta aquí, y por favor, no me digan la tontería de por qué no lo averiguo yo. Aquí las estadísticas son secreto de estado como la salud de quien tu sabes, y hacer preguntas un cubano de a pie sobre esos numeritos, le puede salir cara la gracia.

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