lunes, 3 de agosto de 2009

Quien, que y por que.

Primero lo primero, a fuer de ser sincero y consecuente con la realidad, cabe preguntarse, especular sobre quien gobierna Cuba desde la sustitución de un hermano dictador por otro. Al principio, la lógica gobernaba, un hermano que parecía física y mentalmente imposibilitado de gobernar y el otro, que estuvo a la sombra por años, temporalmente elevado al poder, gobernaba, visto en la distancia, con más poder del que dispone en la actualidad. Tras dos años de ajustes y tumbos, de diferencias públicamente manifestadas, el muerto-vivo se ha consolidado como un factor de poder en la sombra, al menos eso parece, el vivo-muerto, escarmentado sobre la inutilidad de la nueva generación para una sustitución que garantice el status-quo, regresa a la normalidad ejecutiva de antes, los mismos discursos, disfrazados de rebeldía, pero concomitantes con la filosofía del anterior.
Como dictadura, morirá con el dictador, como sistema, igualmente por inoperante; sólo en la cabeza diletante de la pareja dictatorial, cabe pensar en sobrevivencia o continuidad, los allegados, más realistas, garantizan la economía futura de sus vidas, no confiando en sus padres, quienes serán desechados en la futura Cuba y denostados en el mundo por depredadores de la raza humana.
Crear una institucion para controlar a los demás, que no ha ellos, está a tono con la historia de drenaje de las arcas del estado. La cantidad de instituciones drenando el menguado presupuesto, sin ingresar o participar aportando a la economía es gigantesca, un ejercito desproporcionado, la ingente cantidad de instituciones culturales, pegadas a la teta del erario público, gastos de seguridad gigantescos, etc, no soportan el escrutinio de un balance contable satisfactorio para el país; el crecimiento artificial que engaña a ellos, los creadores, comparado al real aceptado por la inmensa mayoría de los países, válido para conocer la salud económica de un país, develaría de ser aplicado una tasa negativa de record guiness. Ni aun el abundante suero venezolano, calma o alivia al paciente, postrado economicamente por más de 50 años, cada día empeora la situación y los pañitos tibios, son como gotas en un oceáno de problemas. Obligados a continuar el mal camino que algún día emprendieron, se ven atrapados en esa ruta terminal.
A diario la insatisfacción y los acuaciantes males, derriban la barrera del miedo en muchos, quienes protestan, ahora, a la chita, imposibilitados de espacios públicos para hacerlo en voz alta, las reuniones de delegados y otros instrumentos que servían, al menos, para canalizar el descontento, son cada vez menos, el espacio semanal del bodrio Granma, ha puesto de manifiesto la regularidad e irresolución de problemas comunes que atenazan a la ciudadanía y cuyo origen es mas palpable a todo el pueblo, el sistema. Es de esperar, ante la agudización de la crisis, que el descontento creciente se manifieste de manera violenta, por algún lugar estalla la presión acumulada; mientras, la cúpula dictatorial, ajena a la realidad como siempre, propone, promete y se enfurece de su propia incapacidad; a la gerontocracia le será negada la muerte natural y el entierro con pompas y por qué negarlo, ojalá y así sea, como musitan los corazones de esta nación, aferrados al tradicional ojo por ojo y diente por diente, cansados de voltear la mejilla.