domingo, 18 de marzo de 2012

Actualización del blog.

Las noticias tienen alas, y en muchas ocasiones se visten de tintes violentos y terroríficos; pero nada, entre las miles de desgracias de este mundo, la nuestra, la que me conduele y duele por ser propia y cercana, brilla por su ausencia. Unos pocos, dolientes como yo, por sentir la ofensa de vivir sin libertad como capital, y actuar en consecuencia, se mantienen al tanto de la situación en Cuba. Un machetazoen Palmarito de Cauto que requirió 10 puntos quirúrgicos, bah, eso no es nada; una secretaria de partido llamando a machetear a los opositores en Palmarito de Cauto, caramba, eso no llena ni una línea en las noticias importantes del día; presas varias Damas de Blanco, tampoco tiene acogida en los titulares; es como silencio cómplice; total, los cubanos van como borricos a la Plaza y la televisión estatal toda, muestra el apoyo "generalizado".

La represión en la región oriental de Cuba es intensa y extensa, cada segundo se comete una injusticia contra un cubano del oriente del país; la ausencia de sedes diplomáticas, de agencias de noticias, grandes cantidades de turistas, crean el contexto ideal para la impunidad de los represores y le dan manos libres para ejercer la violencia y la brutalidad.

Tres meses en la antigua provincia de Oriente, me hacen testigo de primera mano de los hechos. 17 días en total y el paso por cuatro lugares de "detención" en los calabozos, me permitieron constatar cuan dificil es la vida diaria para los compatriotas orientales; los presos pasan en unainterminable sucesión, los delitos por "convicción", las absurdas prisiones preventivas, la "peligrosidad" sin derecho a fianza, los deportados, son visitantes regulares de los calabozos. La violación de derechos elementales es tan común, que pongo dos ejemplos de entre tantos: Mientras las tablillas en la recepción de los calabozos reza entre los derechos de los presos, la realización de una llamada telefónica, brilla por su ausencia el teléfono para ello, de ocurrírsele interpelar a alguno de los carceleros, la respuesta es que no pueden sacar a los presos a donde exista uno, en fin, incomunicados, y mientras, los familiares llamando a los hospitales, las estaciones o a otros familiares, desesperados por una respuesta sobre el paradero de los suyos; el uso de la tortura psicológica, no podía faltar en un sistema a la medida de los nazis, el acceso al agua es controlado y regulado en determinados momentos del día, al igual, el acceso a los cigarros está bajo la batuta de los carceleros; algo paradójico, como otro ejemplo, es negada la toma de sol, alegando que como sólo se estará hast 72 horas, no es necesario, sin embargo, como he dicho aquí anteriormente, por el delito de "peligrosidad" pueden tener preso más allá de este tiempo.Eduardo, un campesino de El Cobre, 56 años, firmó sin leer unos papeles que le llevaron con una explicación banal, resultado, preso bajo el acápite de peligrosidad. Son tantos y tantos los nombres, las causas injustas y el dolor que pesa en el corazón al ver tantos cubanos pasar por prisiones, que me reafirmó aun más en el propósito de lograr libertad para Cuba y los cubanos todos de este mundo,porque no sólo sufrimos los que vivimos aquí, sufren los de fuera también, muchos no lo saben, ignoran sus recónditos sentimientos, les veo venir bajo el mismo yugo que aun tienen en sus cuellos, y me digo, son como niños, ignorantes de todo aun de su desgracia, solo ríen al entrar al aeropuerto y rellenar los bolsillos de quienes les obligaron a huir y aun les hacen vivir en la desgracia, una peor si se quiere, desterrados y aun callados, para no perder al menos, la entrada al país que no pueden dejar de amar.

Incluso el odio se me ha curado, me queda tan sólo, dolermepor quienes nos violentan y golpean, aun ellos son víctimas como nosotros, del odio y la injusticia de que un tirano, nos haga ir unos contra otros, como esos gallos de pelea que divierten pagando con su sangre y muerte la diversión.

Aun el tirano, en su ceguera, me causa pena y dolor, pena de que se diga cubano, dolor porque de su mano viene todos los días de esta tierra la desgracia de quienes un día, se creyeron sus mentiras.


PD. Al parecer, me persiguen los teclados defectuosos, perdonen los gazapos.