viernes, 4 de septiembre de 2009

El mar y las gotas de agua.

El Talón de Aquiles de la democracia, es sin dudas, el grado de libertad de cada ciudadano y su escala de valores; esto último, adquirido y transmitido a traves del tiempo, conformando junto a otros aspectos, la idiosincracia de cada pueblo en particular.
No es bien visto, a nivel de pueblo, por ejemplo, buscar revancha o venganza manu propia, eso esta bien en las películas, no en la realidad, y aquí acoto de paso, la diferenciación que hace ese mismo pueblo entre realidad y ficción, entre lo entretenido y lo serio; esto salvó a Bill Clinton del affaire Lewinsky, en el que primó la visión popular de la persecución sobre el delito de mentir al congreso, el asunto terminó bien al totalizar, pues aun cuando no fue servida la justicia, ganó un interés vital en la democracia, el uso oportunista de la realidad para lograr ganancias políticas no es bien visto. Por el contrario, es común en Latinoamérica y otrras regiones del sur, lugares unos cuantos años atrasado de las avanzadas culturas occidentales, las cuales cuentan con siglos desandados en el camino de avance a la quimérica por su infinitud cumbre del desarrollo humano por delante; la persecución por motivos políticos, los expresidentes o exfuncionarios se ven sometidos a rabiosas persecuciones judiciales con el propósito de anularles como posibles y futuros contrincantes en la arena política, si bien es cierto el cometimiento de delitos achacables al mismo atraso enunciado antes, prima para el pueblo la fabricación sobre base ciertas o infundadas, que el otro peor actuar oportunista y de peores consecuencias a la larga para la sociedad de esos países de una dictadura de izquierda brutal.
Factores como la educación con cultura, pues de que sirve educar si no se cultiva la persona en la apreciación de las obras humanas, que finalmente deriva en entendimiento y pensamiento activo, dando como resultado la tolerancia y el diálogo antes que la tozudes disfrazada de perseverancia y la violencia; religiosos mesiánicos y dados a la interpretación estrecha con mucho más control sobre la individualidad por su religión, como lo es la católica en contraparte a la protestante y otros componentes o factores, son caldo de cultivo para sucesos concluyentes en dictaduras y dictadores, como demuestra la realidad latinoamericana pasada y actual.
Lo anterior, es mi parecer, responde a su vez a preguntas y asombros sobre la longevidad de dictaduras como la de Cuba y otras, por igual, al sistema soviético y de países satélites de él en la antigua Europa oriental.
Como la humanidad avanza, tiene como contrapartida el peligro, el ingente y creciente flujo de la información, el acceso a ella por parte de grandes masas de población, que les permite, aun sin percatarse, del necesario procesamiento de volúmenes de información, derivando en el desarrollo y ejercicio del pensamiento individual y colectivo, este último mediante la interacción.
De esto último es ejemplo, el reciente debate sobre la propuesta del presidente norteamericano para reformar el sistema de salud, bien sea necesaria o no la reforma, dos preocupaciones han tenido la oportunidad de enfrentarse en el ruedo democrático; la una, el atractivo y deseable acceso gratuito a la atención de salud, versus sangrar ingentemente el erario público; mientras la primera ganaría un premio de popularidad, la segunda deja ver una posibilidad nada deseable de hacer penar los futuros gobiernosy por ende gobernados con gastos públicos y de posibles resultados opuestos a los que se desea o peor aun, el deterioro en el nivel de salud por convertir al estado en un competidor invencible por su poder, de la iniciativa privada en el sector, muy activa en EEUU. Concluyendo, el pueblo norteamericano tiene en sus manos, los argumento en pro y en contra por haber sido informado a priori de elementos fundamentales del tópico que tratan. Como detalle, agregaría que a pesar de la propaganda que desde hace ya tiempo se hace comparando el subsidiado sistema europeo de salud, con el norteamericano, la opinión pública sopesa con atención y preocupación, el actual cambio propuesto.
Tengo confianza en el futuro, en un mundo cada vez más integrado y participante consciente y gustoso de la democracia y la libertad, inseparables hijas del perfeccionamiento humano; pero advertir y prevenir los peligros, nunca, ha estado de más.

1 comentario:

Panameña dijo...

Cuando Cuba salga de este penoso lapso...el cielo será el límite de su crecimiento desarrollo. Espero con ansia ver ese dia pronto :)