Un solo cambio, la libertad.

Hace unos días, conocí por los medios extranjeros, por supuesto que no gubernamentales, la decisión de varios opositores de nuclearse con el propósito de traer la ansiada libertad a Cuba; y ven por ellos. La estrategia actual de la dictadura, es adormilar a los cubanos con supuestos "cambios" que por más de 40 años no ha estado dispuesta a hacer, más que eso, le es imposible por que iría contra su existencia monótona e inconmovible en el propósito de perpetuarse en el poder la familia Castro.
No debe esperarse cambios que no sucederán, no debe esperarse ni la muerte del sátrapa para demandar el fin de 48 años de injusticias, crueldades, muertes y prisión para aquellos que han reclamado la democracia que nos es inherente por nuestra condición de seres humanos.
Basta ya, de cambios, de esperas, de esperar lo que la dictadura no va a dar. El cubano sólo necesita un cambio en singular, sí, un cambio a la libertad, es el único cambio que necesitamos y debemos demandar de quienes sólo han demostrado incapacidad, de quienes han demostrado como única capacidad la de traer desgracias a un pueblo de que hoy ronda los 11 millones de almas en el corazón del caribe por 48 años.