domingo, 12 de agosto de 2007

Riflexiones de Cubabit.

Sobre el dictador.
Este fin de semana, vísperas del onomástico del dictador, algunos detalles se han sucedido fuera de lo común. Entre ellos, cabría mencionar la ausencia de programación televisiva para el domingo en la abuelita; otro no menos importante, es el reforzamiento de las opciones de entretenimiento, siempre escasas por estos lares; no puedo especular sobre las causas de estos inusuales sucesos, pero indudablemente, algo se cuece, ya veremos en los días subsiguientes cual es el plato que presenta la decadente y moribunda dictadura cubana.
Otro detalle, este no tan importante, es la poca propaganda oficial sobre esta fecha del cumpleaños, lo cual pudiera achacarse a unos cuantos motivos, en particular estoy pensando en la posibilidad de que como ha escrito Nuevo Acción, el estado de salud actual no permita una declaración definitoria, ya sea en un sentido u otro, es decir, alabatorio o de anuncio oficial sobre la condición actual delicada.
Sobre el error de El Nuevo Herald.
A menudo, una noticia o suceso, pienso que les pasará alguna que otra vez a los lectores, se queda en estado latente, en un subproceso de análisis o sintesís o ambas, es como rumiar el tal suceso o noticia. Luego de rumiar el error del Nuevo y los dimes y diretes del lado de acá del estrecho de la Florida y allende este, resumo unas de las cuantas teorías o conclusiones posibles a las que he arribado, quizás alguien pueda masticar algo más esto y traer otros detalles:
-De un tiempo para acá, por unas cuantas razones ya hechas públicas o no, la compañía McClatchy, dueña del nuevo, ha tenido unos cuantos detalles que indican el deseo de congraciarse con la dictadura cubana. Entre las teorías que se manejaron o manejan, esta la de que la susodicha compañía, aspira a abrir una representación en La Habana; otra que es de creer, pues es extremadamente difícil conocer quien realmente es el dueño de los capitales invertidos en tal o cual compañia, ocultos muchas veces el dueño en manos inimaginadas o desconocidas, es la teoría de que el mayor capital de la compañia McClatchy, se encuentra en manos de la dictadura a traves de terceros personajes incondicionales de la dictadura, a esto último se puede agregar, que el cambio en la política editorial de los Heralds, se produjo a raíz de la compra de estos últimos por McClatchy.
-La explicación a más de ser complicada, no arrojaba ninguna luz sobre el error en sí, y terminaba creando más preguntas que las que había al inicio, aun para conocedores de los tejes manejes de cambiar una base de datos de un servidor a otro. Es de notar que fue este el único error, cuando un programa debiera repetir el error ante situaciones que no son únicas.
-La dictadura, estuvo entre los críticos, cosa curiosa, estuvo entre los primeros en dar publicidad al error.
De todo lo anterior, he pensado, no sin base si han leído hasta aquí, que el asunto del mencionado borrón del Nuevo, tiene la huella de la mano que mece la cuna, el origen de tantos errores inexplicables o poco convincentes en su explicación de este mundo. ¿Que mejor que sucediera esto a pocos días de retomarse el mejunje en los tribunales de EEUU?, por un lado resta credibilidad al mayor portador de noticias de los cubanos en el exilio, confunde a los que leen esas noticias que finalmente no saben a ciencia cierta en que estado de cosas anda el tópico y por último, no es un error que precisamente perjudique de alguna manera a la dictadura, más bien, le beneficia.
A estas alturas, alguien en Cuba se frota las manos por el éxito y exhibe el resultado a sus superiores, mientras, el moribundo ordena abrir con todas las baterías contra su muy personal enemigo. Ya se sabe el pataleo de los de oscuro propósito y final predecible.

2 comentarios:

analista dijo...

Y cual fue el error del Herald?. Estoy detrás del palo, como se decía antes en Cuba.

Anónimo dijo...

Analista, diculap la demora, pero luego de tratar varios días infructuosamente de postear la respuesta, desistí, la red está imposible, no se a ciencia cierta si este comentario saldrá. Sobre el error del Herald, ya no aparece enla columna de Cuba ni la disculpa, es historia, y me es engorroso el detalle por lo extenso, te puedo resumir que el Herald, publicó un artículo del año pasado como si fuera hecho en este, le achacaron el error a la informatización (cambio de servidores). Saludos y gracias por comentar. Karamchand