miércoles, 23 de abril de 2008

Pasen señores, pasen, se reune el ALBA.

En un escrito anterior, que trataba sobre la soberanía, queda claro la exclusión o tergiversación del término a conveniencia de la dictadura cubana y sus dictadorzuelos o con ansias del poder total sobre sus nacionales que hoy pululan en América Latina.
Ahora, fieles a crear la desunión, lo que separa, la diferencia, han promovido una especie de alianza sudamericana, cuyo propósito evidente, es deslegitimar la OEA, excluir al norte de América, principalmente EEUU y configurar un mecanismo de intervención financiado desde Venezuela con objetivos nada saludables para una región de conflictos en relevo de 4x400, propiciados principalmente desde Cuba hasta hace poco y ahora potenciados por el dinero de los petrodólares venezolanos.
Si EEUU, como ha sucedido, mañana declarara el propósito de realizar maniobras militares de conjunto con Colombia o Perú, no tardarían de vociferar a pleno pulmón estos que hoy pretenden excluir a parte a de América en una asociación que solo echaría leña al fuego creciente de una izquierda en el poder que como se ha demostrado, se interesa más en permanecer entreteniendo en conflictos y creando "enemigos" para distraer la ineficiencia de sus administraciones.
Algo similar, sucedió cuando algún congresista norteamericano, propuso como respuesta a Telesur, la creción de otro canal que reflejara la realidad que como se ha visto a fecha de hoy, tergiversa Telesur, tan pronto se conoció la propuesta antídota al mejunje Telesur, pegaron el grito en el cielo, sin embargo, ¿por qué ellos sí y otros no?.
Dentro de la reunión del ALBA, otro esperpéntica organización, empollada por los iracundos de la izquierda obtusa y de oscuros propósitos, valga la redundancia, ha manifestado Chávez, la intención de tratar el asunto Bolivia, esto es una intervención evidente en asuntos internos de otros países, sobre todo, por ser Chávez la persona menos a propósito en ese sentido, al quedar clara su posición al respecto, que le invalidad para jusgar imparcialmente sobre el meollo boliviano; es de esperar, que arremeterá siendo consecuente con la posición manifestada anteriormente, contra los gobernadores que ante la imposición de una constitución por Morales, han decidido llamar a la autonomía previsoramente al notar como Morales se afila los colmillos para hundirlos en esas ricas regiones y poder solventar un gobierno a todas luces de exclusión y latrocinio. No fueron esos gobernadores quienes primeron tiraron el guante, ellos han recogido el guante y lo devuelven a quien les ofendió imponiendo una constitución sin consenso, cambiando según su antojo las reglas predeterminadas para rehacer la constitución; ahora quiere Morales hacer una especie de campaña mediática con el apoyo de Chávez y comparsas limosneras de los petrodólares.
Lo que antes parecía una respuesta excesiva, hoy se hace evidente la necesidad, un canal que desmienta la torcida información de Telesur y una Organización de Estados Americanos (OEA) apoyada en interés de la región ante líderes empeñados en cruzadas medievales obsoletas y contraproducentes a los intereses de la humanidad, excluyentes y discriminadoras.

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