Segunda muerte de Martí.

Vamos a imaginar que el apostol, Martí, viviera en la Cuba de la dictadura actual. Imaginemos, extrapolando, que fuera periodista pagado por un diario argentino, viviendo en otro país, distinto al suyo, reportando como reportó de lo que quiso como quiso. No es difícil intuir que a estas alturas, luego de la primavera del 2003, con toda probabilidad se contara como el único fusilado, pues hay que ver las crueles sentencias de la dictadura sobre aquellos 75, a Martí seguramente le hubiera correspondido el clásico fusilamiento tan de uso por la dictadura. A fuer de ser sinceros, aquella primavera, fueron presos 75 y uno, ese Martí, fue fusilado definitivamente, ¿a alguien le queda dudas?