-"... gracias al embargo de los EE.UU. no tienen que pagar derechos de autor.", la cita la he tomado de un artículo de Fernando Ravsberg publicado en su blog en la BBC Cartas desde Cuba; alguien ha pensado que trata de ser irónico Ravsberg en este enunciado, a mi particularmente, no entiendo la frase como ironía, el sabor es más bien el de las consabidas frases de la dictadura y sus lacayos; independientemente de que una persona es libre de pensar según le plazca, incluso que el boqueo es improcedente o ilegal, asumir el hecho sin aclarar el alcance o su improcedencia, es a lo menos irresponsable en un periodista, pues de hecho, comulga con el acto punible por omisión de su clarificación al lector, no hablo de una posición , hablo de una realidad. Es ilegal, ilícito y punible el acto de robar propiedad intelectual, si alguien cree ver alguna razón o justificación, no hay, y menos cuando ese acto criminal lo realiza un gobierno, arreglados estamos si alguein cree en pleno siglo XXI que perder un ojo amerita otro; por encima de esto, el propio embargo, un acto soberano de EEUU, precisamente fue provocado por la ilegal confiscación de propiedades cuando dió comienzo esta dictadura, amén de otros actos realizados por el odio cerval del dictador Fidel Castro. Ser periodista en Cuba, es una responsabilidad ante la humanidad, no es sentarse a mirar el panorama o los toros desde la barrera, aun en los estrechos límites impuestos por la dictadura a la información de y desde la isla, es posible tal realización; tratar de condescender o plegarse a algúnos de los guiones de la dictadura, no es correcto, ni ético. El médico ha de curar la herida o aliviar el dolor, sin que medie conocimiento de la creencia o filiación del paciente. Ser objetivo y llevar esa objetividad mediante palabras, para eso es el periodismo un estudio universitario, para suplir las herramientas adecuadas en su consecución.
lunes, 24 de mayo de 2010
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